Después de un invierno frío, gris y lluvioso, tenía todas mis esperanzas puestas en esta primavera, pero me temo que la climatología no está de mi lado y que los días de sol y calor van a tardar en llegar.
Ya es primavera, sí, pero sólo en El Corte Inglés y las revistas de moda. Mientras tanto, en Coruña seguimos con nuestros jerséis y vestidos con medias y, cómo no, con nuestros paraguas para protegernos de las continuas lluvias.
Este año el dicho de «Abril, aguas mil» está siendo más real que nunca, pero es que ya cansa un poco tanta lluvia después de cuatro meses de agua. Y al final ya no sabes ni qué ponerte para salir a la calle, yo estoy pensando en comprar un buzo y unas botas de pescador, y de paso también una canoa para desplazarme xD
Bromas aparte, sí que es cierto que este tiempo desmotiva bastante, y ver la ropa de primavera-verano en los escaparates y revistas no ayuda cuando el frío no te permite hacer el cambio de armario. Así que hoy traigo un post lleno de inspiración vintage para una primavera fresca en la que lo mismo sale el sol como al rato se pone a llover a cántaros…
Porque lo importante es no perder la sonrisa (ni el estilo) haga el tiempo que haga.
Y es que no vale la pena llorar por la falta de sol, que de agua además ya vamos sobrados.
No queda otra que resignarse, ponerle al mal tiempo buena cara y asumir que esta primavera, además de la estación de las flores, es la época de la gabardina.
El ‘trench coat’ o la gabardina es una de esas prendas básicas que no pueden faltar en ningún fondo de armario, y menos para los que somos del norte, donde la temporada de lluvias viene siendo casi todo el año.
Lo bueno del ‘trench’ no es sólo que te proteja de las inclemencias del tiempo, sino que además aporta siempre ese aire de sofisticación y elegancia, al menos en sus modelos más clásicos.
Como las célebres gabardinas de Burberry que vemos en la imagen de arriba, o la de Yves Saint Laurent que aparece bajo estas líneas.
Son prendas clásicas que se han convertido ya en un icono de la moda, al igual que las famosas que las lucieron en su día. Actrices como Brigitte Bardot o Goldie Hawn hicieron de la gabardina una de sus prendas estrella durante los años 60.
Aunque mi musa siempre será Audrey Hepburn, que supo llevar la gabardina como nadie, tanto con looks sofisticados como con otros más casuales y de estilo ‘beatnik’.
Ya sabéis que adoro la moda vintage, especialmente los años 50 y 60, y para mí siempre será una fuente de inspiración y una referencia a la hora de vestirme.
Por eso, en los días lluviosos siempre vuelvo la vista al pasado, a esos looks clásicos con gabardinas con o sin capucha, en color camel o en tonos intensos como el rojo o el verde.
Y, por supuesto, el paraguas siempre será el complemento estrella para los días de lluvia.
A veces lo llevas de adorno aunque esté brillando el sol, porque nunca se sabe cuándo van a empezar a caer las primeras gotas.
¡Aquí hay que estar preparada siempre!
Y nada de salir a la calle sin gabardina o chubasquero, que esta primavera viene pasada por agua.
Pero la lluvia no implica renunciar al estilo, y todas estas imágenes dan fe de que se puede ir la mar de estilosa incluso cuando el sol brilla por su ausencia.
Y, para las que se deprimen con este tiempo tan gris y no quieren vestirse con colores neutros y apagados, también hay opciones mucho más coloridas.
Color en las gabardinas y los paraguas
Y también en los botines, porque el uniforme de la lluvia no estaría completo sin un buen par de botas o botines resistentes al agua.
Sí, hay que animar de alguna manera los días de este abril gris y lluvioso, y qué mejor manera de hacerlo que inspirándose en la moda de los años 60, la época del ‘Flower Power’ y la moda en Technicolor.
Chubasqueros y gabardinas de rayas, en azules y rosas brillantes…
… o en rojo carmesí y amarillo.
¿Quién dijo que la moda para la lluvia es aburrida?
Aquí os traigo unas cuantas imágenes más de inspiración vintage que demuestran que, aunque el sol no brille, nosotras podemos brillar por él.
Me encantan todas estas gabardinas de corte clásico y al mismo tiempo muy juveniles y llenas de color.
En los años 60 y 70 la moda para la lluvia se volvió mucho más alegre y colorida que nunca, pero también había espacio para los modelos clásicos en tonos neutros.
De los que que yo me declaro muy fan, sobre todo si se combinan con faldas de cuadros y vestidos de estilo colegial.
Para mí es la combinación perfecta: una gabardina vintage en color camel y un vestido de cuadros de colegiala de los 60.
El look perfecto para cualquier momento, especialmente para estos días de primavera tan fríos y lluviosos que estamos teniendo, en los que a veces ya no sabe una ni qué ponerse.
Pero la inspiración siempre me acaba volviendo cuando echo la vista al pasado, a esos looks de los 50, 60 y 70 que tanto me fascinan.
Y como además tengo la suerte de tener una gabardina original de los años 60, ya no necesito nada más para emular a mis musas vintage.
Esta maravilla de gabardina era de mi abuela, y ahora soy yo quien la luce con orgullo.
Es perfecta para la primavera coruñesa, en la que los días de lluvia son bastante frecuentes.
Y además queda genial con vestiditos de cuadros de colegiala vintage.
El forro interior de la gabardina también tiene cuadros, como las míticas gabardinas de Burberry (aunque ésta no lo sea… pero aún así para mí es una joya)
Y por supuesto no me olvidé de las botas, de estilo ‘granny chic’ al igual que el bolso rojo a juego con el vestido.
El vestido es una de mis creaciones, lo hice hace ya bastantes años (más de 10) pero sigue siendo uno de mis favoritos.
Por supuesto me inspiré en los pichis de colegiala de los años 60 y 70, aunque creo que es bastante evidente jaja
Y así es cómo se le pone color a un día de lluvia: con un vestido alegre y colorido, y por supuesto con botines y gabardina.
Ya vendrá el tiempo de los vestidos de flores, espero… pero mientras, seguiremos poniéndole buena cara a este mal tiempo.
Me encanta como siempre tus post y las fotos ( los figurines y tb en donde sales Tú).
Mis gabardinas preferidas son las de colores.
Tienes en tu armario una buena joya de gabardina de tu abuela. Me encanta!!!
Besos.
@srayuriko
Muchas gracias!! Me alegro mucho de que te gusten mis post, con el tiempo que tardo en prepararlos siempre hace ilusión saber que a la gente le gustan 🙂
La gabardina de mi abuela es una maravilla, además de que abriga bastante porque el forro es de lana. De colores tengo la amarilla que saqué hace unos posts, aunque no le diría que no a alguna más… Tengo que ir de mercadillos a ver si encuentro más joyas vintage jaja
Un beso!
Me encanta audrey😍😍😍cierto es que el trench es una prensa que bien merece un post exclusivo, y que buen repaso le has hecho a la moda jejej
Es que Audrey fue única, como actriz y como icono de estilo, yo también la adoro! Y sí, el trench bien merece un post en exclusiva, o incluso varios! Como sigan las lluvias igual inauguro una sección de gabardinas en el blog jajaja
Un beso!
Que maravilla de artículo! ♥yo también soy una fan incondicional del trench y especialmente si es vintage , conservo algunos de los años 60/70 rescatados de rastros que guardo como oro en paño
Hace poquito que te he
descubierto pero te animo a seguir publicando , me encanta tu estilo♥
Muchísimas gracias por tu comentario, Maria! Me alegro de que te haya gustado el artículo y de saber que hay más gente que de verdad aprecia el vintage. Yo además de esta gabardina de mi abuela he recuperado recientemente una que fue de mi padre en los 70/80, me la pienso poner en plan ‘oversized’ que total ahora se lleva jaja
Y eso, que me alegro de que te guste mi blog y mi estilo… a ver si el próximo post puedo preparlo antes, que no decaiga el ritmo 😉
Un saludo!